La perspectiva bíblica sobre el pago de deudas: ¿Qué enseña la Palabra de Dios?

En la sociedad actual el endeudamiento es una práctica común. Las personas suelen adquirir deudas para comprar bienes y servicios que no pueden pagar en efectivo. Sin embargo ¿qué dice la Biblia sobre el pago de deudas? ¿Es bíblico no pagar las deudas? En este artículo exploraremos la perspectiva bíblica sobre el pago de deudas y lo que la Palabra de Dios enseña al respecto.

¿Qué dice la Biblia sobre el pago de deudas?

La Biblia da muchas referencias sobre el pago de deudas. En el Antiguo Testamento por ejemplo encontramos en el libro de Proverbios 22:7 que "El rico se enseñorea de los pobres y el que toma prestado es siervo del que presta". Además en el Salmo 37:21 se nos dice que "El impío toma prestado y no paga; mas el justo tiene misericordia y da".

En el Nuevo Testamento encontramos en Romanos 13:7-8 que "Pagad a todos lo que debéis: al que tributo tributo; al que impuesto impuesto; al que respeto respeto; al que honra honra. No debáis a nadie nada sino el amaros unos a otros; porque el que ama al prójimo ha cumplido la ley". Además en Mateo 5:25-26 Jesús enseña que "Acuerdaos de lo que os he dicho: El siervo no es mayor que su señor. Si a mí me han perseguido también a vosotros os perseguirán; si han guardado mi palabra también guardarán la vuestra. Pero todo esto os harán por causa de mi nombre porque no conocen al que me envió".

¿Es bíblico no pagar las deudas?

Aunque la Biblia no dice específicamente que no pagar las deudas sea pecado enseña que es importante honrar nuestros compromisos financieros. En Proverbios 3:27-28 se nos dice que "No te niegues a hacer el bien a quien es debido cuando tuvieres poder para hacerlo. No digas a tu prójimo: Anda y vuelve y mañana te daré cuando tienes contigo qué darle".

Además en Deuteronomio 15:1-2 se establece la ley de la remisión de las deudas cada siete años. Esto significa que si alguien no podía pagar sus deudas se le perdonaban en el séptimo año. Sin embargo esto no significa que la persona no tenga la responsabilidad de pagar sus deudas en otros momentos.

Conclusión

En resumen la Biblia enseña que es importante honrar nuestros compromisos financieros y pagar nuestras deudas. Aunque la remisión de las deudas es una práctica bíblica no significa que no tengamos la responsabilidad de pagar nuestras deudas. En última instancia debemos ser buenos administradores de los recursos que Dios nos ha dado y cumplir con nuestras obligaciones financieras de manera justa y equitativa.

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